Ya se que en tres entradas, es la tercera vez que hablo de esta película. Prometo intentar que sea la última.
Pero es que el domingo por la noche encendí la tele y la estaban poniendo, por lo que tuve que verla de nuevo, obviamente.
Tengo el dvd y la habré visto no sé las veces, pero si llego a casa y la emiten tengo que verla. Me quedo como hipnotizada y ya no vuelvo a la realidad hasta que no escucho a Sid Vicious destrozando My Way al acabar. Momento en el que tomo de nuevo conciencia del mundo y esgrimo una sonrisa de felicidad plena.
Desde la primera frase, aquella de "Que yo recuerde, desde que tuve uso de razón siempre quise ser un gangster", Scorsese consigue meternos de lleno en el relato con esa voz en off del protagonista Henry Hill, interpretado por Ray Liotta, que nos va narrando toda la historia. Con un ritmo increíble, un guión por el que debemos de dar gracias hasta la eternidad, y unas interpretaciones para dejarnos con la boca abierta. Por otro lado tenemos la música, en la que se percibe con cuanto cariño y acierto es escogida en la filmografía de este maestro.
La música está selecionada a la perfeción, y crea, junto con la voz en off, ese ambiente que es el que nos atrapa hasta el final.
Porque Casino también es una película gloriosa, pero para mi no tanto como Goodfellas. Aunque si hay que destacar los dos papelones que ejecuta Joe Pesci en ambas. Es que no se puede disfrutar más de una peli. Para muestra de su genial interpretación en ésta que nos ocupa, aquí os dejo un buen ejemplo. La escena de Funny Guy, una de mis favoritas.
Por cierto, abrí este blog contando que me hubiese encantado comenzar explicando lo que era un plano secuencia con uno de los mejores ejemplos del cine, pero no lo había encontrado. Pues hoy lo encontré -el de Goodfellas- y con él sobran las palabras y cualquier explicación se queda corta. Así que aquí lo dejo.
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